doce mas uno
Anoche me desperte varias veces para mirar el “telefono-reloj-galactico” (una antigüedad que todavia arrastro a contracorriente de las applicaciones de vanguardia que sembro el difunto Steve Jo-Jobs), con la excusa de despertarme a tiempo para … cebarme unos mates y salir volando aqui mismo, a Neuquen, adonde acabo de llegar … Curiosamente me estoy despertando desde pasadas las cuatro de la mañana para no quedarme dormido. Lo que consegui es mantenerme despierto y dormido al mismo tiempo (alternando) … y todo lo contrario. La cosa es que llegue a esta habitacion, que tiene la superficie de “tres veces del departamento donde vivo” … enciendo la tv y lo veo a Sir Paul cantando canciones, un recital del Beatle Paul Mc Cartney en Londontown. Lo primero que me viene a la mente es “No quiero seguir cantando cuando tenga los años de Macca” … pero tengo tiempo para pensarlo veinte años muchas veces … No es un mal plan (seguir cantando) para los setenta años … y Paul esta en mejores condiciones que la mayoria de los reyes septuagenarios, y los plebeyos septuagenarios. Dicho lo cual, estimo que … La carretera parece saludable y (por lo menos Paul) confirma lo que siempre (muchas veces y hace tiempo) pense (de la carretera) … Esto no es gran cosa pero te mantiene “joven” … Bueno ya se, la juventud esta en un espiritu que no podemos confirmar que exista realmente, y lo que importa es la salud. Tampoco puedo jurar que no haya mejores cosas que hacer con setenta, pero Sir Paul parece contento, o sabe como aparentarlo. Siempre fue un Beatle actuando de Beatle. Un actor de metodo. Y suena muy bien en la TV de esta faraonica habitacion neuquina.
de momento voy a quitarme las zapatillas
y juntar ganas para cantar esta noche
(por de pronto)
que veinte años no es nada (segun Gardel),
(o lo es todo, para alguien de veinte años)
Y/o para cualquiera.
Lo dice alguien que mataria por cinco minutos !!
