“Soberbia Discapacidad”
Riggan Redondo y Fernando Charles. Tertulias oportunas
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RR: Europa vuelve a sus cavernas oscurantistas, al desprecio por la vida humana y la libertad. Pero hay que tratar de tomárselo con soda, como un chiste o un desatino que hay que tragar con la mayor filosofía posible.
FCH: Caramba, un conjunto de idiotas, crueles pero apelando a la bondad del resentimiento. En palabras sencillas, irrespetando la libertad con la excusa de los animales.
RR: Animales que nos comemos masivamente, en restaurantes de lujo o en hamburguesas.
FCH: Entonces la excusa es la alimentación. Dicen que “es distinto”, pero nos desean la lepra y el empalamiento.
RR: Cualquier día van a atacar nuestra mesa de tertulianos, armados con cuchillos. Violencia como “solución” a la crueldad de un mundo que permite el hambre desigual como contrapartida a la industria alimentaria y el auge de la gastronomía como cosa genial …
FCH: La misma violencia que condenan, pero sometidos a un régimen de discriminación positiva: Pate de hígado de ganso, si … La tauromaquia de Federico García Lorca y Picasso, eso no.
RR: Dan a entender que el paté de foie es una necesidad alimentaria del mundo.
FCH: En el mundo ZEITGEST la piedad animalista es una falta gravísima. Es malvado puritanismo. Fuimos advertidos por intelectuales y novelistas, pero no leímos ni escuchamos.
RR: Que hable Bertolt Bretch y nosotros leemos:
FCH: “Cuando la hipocresía comienza a ser de muy mal calidad es hora de comenzar a decir la verdad”
RR: Sabiamente. Pero hay otra frase que escarba en la fantochada de perseguir símbolos inmóviles, de presentar un enemigo para consagrarse en el poder manipulando sentimientos superficiales …
FCH: “Estar contra el fascismo sin estar contra el capitalismo, rebelarse contra la barbarie que nace de la barbarie, equivale a reclamar una parte del ternero y oponerse a sacrificarlo.”
RR: Caramba.
FCH: Tengo una muy oportuna de Don José de San Martin, el padre de la patria.
RR: Alza la voz …
FCH: “La soberbia es una discapacidad que suele afectar a pobres infelices mortales, que se encuentran de golpe con una miserable cuota de poder.”
RR: Amén.
FCH: No quiero despedirme sin antes darle el pésame a la comedia.
RR: ¿Qué habría que lamentar?
FCH: El otrora irreverente ateo, el arlequín británico, aquel que supo ofender a Holywood con su incorrección política, ahora es un sanguinario animalista enamorado de su gato siamés.
RR: Perdón, Fernando, pero comprar mascota de raza esta muy mal visto por los colectivos de “defensa de los animales a toda costa”. Es colaborar con un mercado de esclavitud animal. La idea es adoptar perros y gatos abandonados para que no ocurra otra “masacre del Jardín Botánico”.
FCH: Gervais, no conforme con castrar un gato y sacarse fotos con su peluche orgánico para dar las buenas noches, se regodea con las terribles heridas sufridas en el ruedo por el matador Jiménez Fortes.
RR: ¿Qué tendrá que ver el amor animal con la crueldad humana, como puede ser tan bestia puritana, no puede ser la misma persona, aquel bufón regordete y tremendamente gracioso?
FCH: Esto no tiene nada de gracia.
RR: Derramar semejante desprecio por la humanidad no tiene justificación alguna. A todos nos gustan los animales y no solo para comerlos en un buen restaurante.
FCH: Ciertamente.
RR: Fernando, me repites en voz alta la frase de Bretch, el punto del fascismo y el capitalismo enhebra bien con nuestra anterior tertulia, el ZEITGEST, el gran fraude y la perturbadora desatención a los problemas reales para concentrarse en el desprecio por la libertad.
FCH: “Estar contra el fascismo sin estar contra el capitalismo, rebelarse contra la barbarie que nace de la barbarie, equivale a reclamar una parte del ternero y oponerse a sacrificarlo.”
RR: Lo dicho. Buen día y buenas tardes
