Visiones Electorales
Visiones electorales
Después de la crisis social y financiera de diciembre del 2001, algunos oráculos políticos pudieron haber vaticinado cincuenta años de gobiernos peronistas considerando el profundo desgaste, por así decirlo, de la gestión de una alianza “liderada” por un presidente de la Unión Cívica Radical. Considerando la tradicional llave del bipartidismo era posible suponer un futurible ciclo importante de signo peronista justicialista en alguna de sus vertientes. El peronismo, lo dijo el propio Juan Domingo Perón, no es “de derecha ni de izquierda, sino todo lo contrario”. Después del apogeo y caída del justicialismo de los noventa, el intento opositor cayo en desgracia en aquel infame diciembre. Si consideramos los cinco gobiernos de transición justicialistas posteriores al 2001, ya son mas de doce años del justicialismo en el gobierno argentino. La Dinastía K supero entonces los históricos diez años de la “primera presidencia de Perón” (ciclo 1945-1955), y las próximas elecciones podrían consagrar gobiernos continuadores de esta zaga en la mayor parte de las provincias, incluyendo la Provincia de Buenos Aires y el ejecutivo nacional. De cara a las elecciones todos los presidenciables se confiesan peronistas aunque, a mi modesto entender, ninguno es un peronista tradicional “de raza”. Lógicamente, hay que considerar la participación durante todo el ciclo de Daniel Scioli, siempre en las primeras filas de la gestión. Pero Sergio Massa fue ministro de Nestor K y , recientemente, Mauricio Macri descubrió una estatua de Perón en la ciudad, para sorpresa de no-pocos que consideran a MM como la mas “seria” alternativa para romper un signo que parece un destino histórico. El país se encuentra dividido según el panorama que presenta la prensa capitalina y los generadores de opinión porteños, pero nada asegura que sea posible detener la marcha de la historia. Para bien o para mal. Incluso para las dos cosas al mismo tiempo.
Riggan Redondo y Fernando Charles
